Volver a vernos, desde nuestras distintas propuestas y miradas, desde nuestros distintos sentires y calores (y porque no decirlo, COLORES). Ahì estuvimos, frente a la Catedral de Santiago, símbolo del patriarcado que no se duerme y se recicla en gobiernos concertraicionistas y desmemoriados. Allí estuvimos para decir que el feminismo autónomo no se transa ni en sus verbalizaciones ni en sus estéticas, allí estuvimos con nuestros megáfonos, con nuestra protesta, con todo aquello que queríamos y debíamos denunciar para restregarle una vez más a este patriarcado concertraicionista que no cuente con nosotras, porque no nos interesa contar con su permiso, a la hora del grito y la protesta.
Aquí seguimos, orgullosas de ser KallejerA, habitantes de la población, sabiendo cuanto vale la tranquilidad de las mujeres en un sólo relato, denunciando través de nuestros murales, porque no pedimos permiso para este viaje que realizamos hace rato a pata pelá sin permiso.
Estamos felices de habernos encontrado con nuestras compañeras Las Moiras, Círculo Hereje, Julia y sus "Malignas Influencias", Vanessa Valdés y su rap que denunciaba que estamos cansadas de vivir desde la rutina y sus privilegios, y nuestras amigas y compañeras de "El Catalejo".
Hoy,
Marzo de 2009, las Kallejeras decimos que basta de estar mostrando caritas buenas pal sistema y para que nos den permiso para actuar y denunciar. Hoy decimos que sómos mucho más que una denuncia, una postura y una decisión política para amar, sentir, para pensar y para crear, hoy SEGUIMOS AQUI Y CON QUIENES QUEREMOS ESTAR.
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